Ojala tuviese alas para volar y poder cruzar ese enorme océano que nos separa, igualmente estas muy dentro de mi y cada día presente estas aquí. Extraño todo de ti, pero lo que mas añoro son tus palabras de aliento, el saber que llegare a casa y tu estarás allí. Y así vivo cada día, con una angustia que me destroza el corazón. Saber que estas mal y no poder estar ahí para ayudarte y contenerte.
¿Hasta cuando esta maldita distancia? Se que todo pasa por algo y que las coincidencias no siempre existen, pero yo solo una cosa pido… que vuelvas, que vuelas cargado de besos y abrazos para brindarme, con esas palabras de aliento que cada día mis oídos escuchaban, que vuelvas con ese espíritu que siempre ha hecho de ti una persona ejemplar, un padre fenomenal. Daria lo que fuera por juntos volver a estar. Te quiero Papa y sabes que te extraño y sufro mucho por no tenerte a mi lado. Pero ¿sabes una cosa? Aquí te esperare porque se que un día, el día menos pensado aquí nuevamente te tendré.
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